1. Alivio del malestar ancestral al realizar una versión simplificada del ritual de Shraddha
La primera noche de Pitrupaksha (dos semanas del año cuando los ancestros difuntos están más cerca de la Tierra), mi malestar espiritual se incrementó. Tenía inmensos sentimientos de tristeza, soledad, desesperación y me sentía completamente insatisfecha. Me sentía indefensa y lloré hasta que me quedé dormida.
Al siguiente día, todavía me sentía negativa y no pude ir al trabajo en la mañana. Escribí una carta a Dios sobre cómo me sentía. Conforme escribía, parecía que las palabras venían a mí automáticamente. Mientras escribía la carta, me di cuenta de que el dolor que sentía no me pertenecía pero sí a alguien más. También sentí que las emociones negativas estaban siendo causadas por uno de mis ancestros femeninos. Yo me daba cuenta de esto y lo entendía claramente, aunque no puedo explicarlo en palabras.
Esta experiencia me ayudó a alejarme de los sentimientos negativos y verlos como una observadora, lo cual me permitió sentir menos malestar en general y pude ir a mi trabajo.
He estado asistiendo a satsangs conducidos por aspirantes de la SSRF, y ellos me habían dicho con anterioridad a Pitrupaksha, que realizar Shrāddha (un potente ritual que beneficia a los ancestros fallecidos a nivel espiritual) durante Pitrupaksha es importante para reducir el malestar ancestral. Mencionaron que aunque podría no ser práctico realizar el ritual en su forma completa en Europa, existían versiones más sencillas que yo podía poner en práctica.
Yo no sabía nada acerca de Shraddha, por lo cual hice todo lo que pude para realizarlo de la mejor manera. Al siguiente día, cuando salí al trabajo en la mañana, llevé conmigo algo de arroz cocinado, nuez de areca (betel), comida vegetariana casera, algo de pan con semillas de sésamo, galletas y dulces. También, llevé una hoja de albahaca sagrada (una planta con mucha sattvikta), varillas de incienso de la SSRF y agua bendita para purificar el lugar donde más tarde realizaría Shraddha.
Después del trabajo, me fui a un parque cercano y encontré un área vacía. Purifiqué el área encendiendo inciensos de la SSRF y rociando agua bendita. Luego, coloqué las ofrendas que había traído conmigo en una roca grande que había limpiado antes.
Después, me coloqué en dirección al sur, alcé mis brazos en el aire y oré lo siguiente, “No tengo nada ni tengo riquezas que puedan ser utilizadas para realizar Shraddha. Rindo reverencia a todos mis ancestros. Todos ellos pueden estar satisfechos con mi devoción. Por favor libérame de la deuda con mis antepasados”.
Inmediatamente después, los mismos sentimientos negativos que había sentido en la primera noche de Pitrupaksha volvieron. Sentí que esto fue una confirmación de que el malestar estaba siendo causado por uno de mis antepasados y que este ancestro estaba presente durante el Shraddha. Después de terminar el Shraddha, me sentí más liviana y más a gusto, aunque también me sentí cansada.
Nota del editor: A veces, uno se siente cansado después de realizar sanación espiritual o rituales que tienen un efecto de sanación espiritual como el Shraddha. La razón, es que sucede una batalla sutil entre la energía positiva de la sanación o ritual y la energía negativa que afecta a la persona. Experimentar esta batalla sutil temporalmente, reduce nuestra energía vital, por lo que uno puede sentirse cansado. Generalmente, uno se empieza a sentir mejor conforme pasa el tiempo y la energía vital se incrementa nuevamente.
Desde entonces he observado que mi mente se ha vuelto mucho más estable. Mi fe en Dios también se ha incrementado y me siento más decidida a incrementar mis esfuerzos en la práctica espiritual.
Gratitud a Dios por darme la oportunidad de realizar el ritual de Shraddha para mis ancestros.