Parte 1: ¿Cuál es la lucha entre el bien y el mal?

Resumen – La lucha del bien contra el mal

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La lucha sutil del bien contra el mal se ha librado periódicamente desde los primeros tiempos, y está sucediendo nuevamente en el mundo sutil durante los años  1999-2025. Luego sobrevendrá una lucha física en la Tierra del 2015 al 2018, y posteriormente el mundo pasará por un período de cambio constante para recuperarse de esta lucha y se preparará para una nueva era. Esta nueva era se conocerá como el Reino Divino y con ella la humanidad experimentará mil años de paz y Rectitud (Dharma). Los tiempos en los que vivimos son muy significativos ya que las repercusiones de esta lucha se sentirán en todo el universo. Sin embargo, los momentos en los que vivimos también son de mucha importancia para la práctica espiritual y para lograr la realización de Dios (el más alto estado espiritual).
Nota: Para comprender este artículo, es necesario familiarizarse con el artículo sobre los tres componentes sutiles básicos sattva, raja y tamade los cuales está compuesta toda la creación. De aquí en adelante en todo este artículo, nos referiremos a estos componentes y sus adjetivos como sátvico (sāttvik), rajásico (rājasik), y tamásico (tāmasik).  Por ejemplo, cuando nos refiramos a alguien como una persona sátvica, significa que tiene una alta proporción del componente Sattva y que es espiritualmente más pura.

1 Definición del bien versus el mal

Desde un punto de vista de la ciencia espiritual, las personas a las que se define como “buenas” son aquellas que viven o han fallecido también conocidas como cuerpos sutiles)  y que:

  • Tienen un intenso deseo de hacer práctica espiritual.
  • Siguen el objetivo de entregar todo, incluyendo su ego, a Dios.
  • Encaminan su vida hacia la realización de Dios.

Estas personas son típicamente aquellas que están por encima del 30% de  nivel espiritual, son predominantemente Raja-Sattva o Sattva y son rectas. Las personas sin las características antes mencionadas, pero que hacen algunas buenas acciones como donar a orfanatos, etc., aunque meritorias, no necesariamente califican para lo que la ciencia espiritual define como “buena” gente, especialmente si el acto se realiza con orgullo. La gente buena y los buenos cuerpos sutiles forman colectivamente las “fuerzas del bien”.

Por otra parte, las personas del mal (vivientes o cuerpos sutiles)  son predominantemente Raja-Tama o Tama, no son rectas y tienen un alto ego.  Incluso pueden estar haciendo práctica espiritual, pero con el objetivo de adquirir poder espiritual para lograr algunas ambiciones personales. La palabra “ego” se utiliza aquí en un contexto espiritual. Además de su significado cotidiano como “una excesiva autoestima y un alto nivel de engreimiento”, la palabra incluye la connotación espiritual de considerarse separado de Dios.  La gente mala y  los cuerpos sutiles malos colectivamente forman “las fuerzas del mal”.

Desde una perspectiva estrictamente de la ciencia espiritual, aquellos que están haciendo práctica espiritual con el objetivo de realizar a Dios y que progresivamente están ofreciendo su cuerpo, mente, riqueza y ego a Dios califican en la categoría de “buenas”. Por tanto, según esta definición de “buenas”, en los momentos actuales las personas buenas en la Tierra son muy pocas. La mayoría de las personas se agrupan en la categoría de “malas”. Sin embargo, entre ellas, aquellas que tratan de dañar a la sociedad y por tanto reducir activamente el componente Sattva o la pureza espiritual en el mundo hacen un total de 30% de la población. La gran mayoría de la gente, debido a la falta de práctica espiritual y su enfoque en el materialismo, puede ser utilizada por energías negativas para lograr lo que las fuerzas del mal necesitan.

2. ¿Dónde se originaron el bien y el mal?

2.1 ¿Desde cuándo existió el mal?

Todo en el universo se ha originado en el Dios Único. El principio de Dios se encuentra en todo en el universo y también existe más allá de él. Desde esta perspectiva, tanto el bien como el mal tienen su origen en el principio de Dios. Ambos han existido desde la creación del universo. Sin embargo, el mal estaba en forma latente en ese momento.

De acuerdo con la ley espiritual de la creación, todo tiene su origen en el principio de Dios, todo se sostiene, y todo se disuelve para retornar al principio de Dios. Así como el universo ha llegado a existir, este será mantenido durante un período predeterminado de tiempo y luego se disolverá. Como parte de este plan divino, el mal que estaba latente al principio del universo va creciendo sostenidamente y se manifiesta en la forma de fuerzas sutiles malas (también conocidas como energías negativas) o a través de la gente . Con el paso del tiempo, la maldad seguirá creciendo hasta alcanzar el 100%, en cuyo momento el universo se disolverá.

2.2 ¿De dónde obtienen su energía las fuerzas del bien y del mal?

Dado que tanto bien como el mal proceden del Principio Supremo de Dios, también obtienen su energía espiritual de Dios. Esto puede parecer una paradoja, pero puede entenderse mejor con la siguiente analogía. Dos empleados de una empresa trabajan con la misma laboriosidad y ganan el mismo sueldo. Después de que el dinero está en sus manos, depende de ellos cómo lo van a usar. Una persona puede utilizarlo para alimentarse y luego de lo que queda puede ayudar a la sociedad. La otra persona puede utilizarlo para perjudicar a la sociedad. Ganar dinero es similar a obtener energía espiritual mediante la práctica espiritual. La intención detrás de hacer práctica espiritual es muy diferente para la gente buena y para la gente mala. Para la primera, el objetivo es fusionarse con Dios, mientras que para la segunda es principalmente obtener poder espiritual para su gratificación. Una vez que construimos nuestra reserva de energía espiritual, Dios nos da la libertad para usarla como nos plazca. Esta energía espiritual cuando es utilizada por la gente para practicar la Rectitud se conoce como  buena energía, y cuando es utilizada para practicar la no rectitud se conoce como energía negra.

Un punto importante a señalar es que cuando la energía espiritual se utiliza con el propósito de implantar la rectitud, se experimenta unidad con ese aspecto de Dios. Por lo tanto, uno puede acceder a la energía divina que corresponde a esa unidad. Así, uno no termina perdiendo ninguna energía espiritual. Sin embargo, cuando la energía espiritual se utiliza con el objetivo de promover la no rectitud, que es contraria a la naturaleza de Dios, la persona o cuerpo sutil termina agotando su energía espiritual.

 

3. ¿Cuál es la misión del bien y del mal?

La misión de las fuerzas del bien es establecer un orden en todas las regiones del universo basado en el componente Sattva. En resumen, es hacer al Universo espiritualmente puro. Por otra parte, las fuerzas del mal se esfuerzan por establecer un reino demoníaco basado en los componentes Raja y Tama. Este reino demoníaco es la clase de reino más propicio para que las fuerzas demoníacas cumplan sus deseos. Estos deseos pueden variar, por ejemplo, disfrutar excesivamente de los placeres sensuales, el uso inapropiado del poder, crear malestar en aspirantes espirituales, y no dejar que los aspirantes realicen la práctica de la Espiritualidad para la realización de Dios.

4. El equilibrio entre el bien y el mal

Debido a que la misión de las fuerzas del bien y del mal es diametralmente opuesta, siempre hay conflicto entre las dos. Este equilibrio varía con el tiempo y nunca es constante. Sus efectos se dejan sentir en todas las regiones del universo. Por ejemplo, cuando hay un aumento en el poder de las fuerzas demoníacas y de las energías negativas, la situación en todos los planos positivos de existencia, que incluyen la Tierra (Bhūlok) y el Cielo (Swarga),  comienza a empeorar. En la Tierra, nos afecta adversamente a nivel físico, mental y espiritual. Sin embargo, las regiones negativas, es decir, todos los diferentes niveles del Infierno (Pātāl), experimentan un efecto positivo en su paradigma. Por otro lado, cuando hay una inclinación de la balanza hacia el bien, hay un aumento en el componente sutil Sattva y se experimenta Beatitud (Ānand) en todo el universo. La paz y prosperidad reinan en la Tierra. Sin embargo, las fuerzas demoníacas se sienten afligidas por esta tendencia positiva. Su grado de malestar es similar al que siente un criminal cuando es obligado a comportarse bien con todos.

4.1¿Cuáles son las razones detrás de la inclinación de la balanza en la dirección de las fuerzas del mal?

Reasons behind the tilting of the balance in the direction of the evil forces

Spiritual Science Research Foundation

En cualquier oportunidad, las fuerzas del mal en el universo están tratando de influir negativamente en el equilibrio de poder. A pesar de los intentos de las fuerzas demoníacas de reducir el componente sutil Sattva  y evitar que los aspirantes de Dios practiquen y difundan la espiritualidad, las fuerzas del bien reinan, siempre y cuando existan Santos y aspirantes haciendo práctica espiritual.  Esto es porque Dios ayuda a los Santos y a los aspirantes a superar las fuerzas del mal por su devoción.

El principal reservorio de poder del bien y del mal reside en las regiones sutiles. Las personas buenas y malas en la Tierra son como las marionetas en sus hilos, ya que ambas obtienen su energía de las fuerzas del bien y del mal en el reino sutil.

4.2 El nivel espiritual y el ataque de energías negativas

Las fuerzas demoníacas generalmente atacan a las fuerzas del bien que se encuentran en el rango de +/- 10% de fuerza espiritual de su propia fuerza. La razón es que un fantasma no puede afectar a una persona cuando esta tiene una diferencia de más de 10% de nivel espiritual a su favor.  Esto se debe a que una persona es capaz de aprovechar de un 10 a 20% de la protección de Dios, que es más que el nivel de aflicción que le crean los fantasmas, y que la protege del ataque de un fantasma que tiene una energía espiritual inferior.

Los fantasmas que tienen un nivel espiritual de más del 10% sobre el nivel espiritual de una persona, no se preocupan en atacarla porque es  intrascendental para ellos. Así, por ejemplo, una persona que tiene un 30% de nivel espiritual será atacada por un fantasma (demonio, diablo, energía negativa, etc.) en el rango de  20 – 40% de nivel espiritual.

Es más fácil para las fuerzas demoníacas del mal ejercer su poder sobre la humanidad, especialmente cuando las personas son materialistas y menos proclives a la práctica de la Espiritualidad. Cuando hay un aumento en el componente Tama en el género humano, las fuerzas demoníacas que son predominantemente Tama fácilmente se aprovechan de la situación y tratan de establecer su control sobre la humanidad.

Consulte el artículo ¿Hasta qué punto el nivel espiritual proporciona protección contra los fantasmas?

5. ¿Cuándo se libró la primera lucha entre el bien y el mal?

El ciclo del universo se divide en 4 eras: Satyayuga, Tretayuga, Dwaparyuga y Kaliyuga. Satyayuga fue espiritualmente la era más pura. Sin embargo, después de esta era el promedio de nivel espiritual del hombre empieza a reducir en cada subsiguiente era hasta llegar a la de menor nivel que es Kaliyuga o Era de los Conflictos que es la era actual. Esta era durará 432.000 años. Actualmente, han transcurrido 5.500 años en esta era. (Consulte el cuadro abajo).

En cada era hay pequeños ciclos de Satyayuga, Tretayuga, Dwaparyuga y Kaliyuga, y la conciencia espiritual y el potencial de la gente en cada uno de ellos varía. Cada mini ciclo se subdivide en cuatro eras aún más pequeñas. Esta subdivisión de mini ciclos dentro de mini ciclos es recurrente hasta que está a seis niveles de profundidad. El más pequeño mini ciclo tiene una duración de cerca de 1000 años. La cifra de 1000 es según el cálculo del tiempo en los momentos actuales. Por ejemplo, un mini ciclo correspondiente a la era Satyayuga sería mucho más largo. Esto se debe a que Satyayuga fue una era que tenía un componente muy alto de Sattva. Una de las características de Sattva es la expansión, mientras que la de Tama es la decadencia. Por lo tanto, un año del Kaliyuga esencialmente significaría muchos más años en Satyayuga.

Al principio de la creación el saldo fue de 100% a favor de las fuerzas del bien puesto que las fuerzas demoníacas estaban solamente en forma latente. Esto es porque en la primera era, es decir, Satyayuga, toda la humanidad se dedicaba a la práctica espiritual y el promedio de nivel espiritual de la gente era de 80%. La gente tenía la actitud de que cada aspecto de su vida era hacer práctica espiritual y una oportunidad de servir a Dios. Cuando el mini Kaliyuga en el último mini ciclo de Satyayuga comenzó, el número total de quienes practicaban el mal en la Tierra era el 2% de toda la población. El componente sutil Tama fue lo suficientemente alto como para que las fuerzas del mal, en ese momento comenzaran su pretensión de supremacía. Esta fue la primera lucha entre las fuerzas del bien y del mal y se libró al final de este mini ciclo de Kaliyuga en el último mini ciclo de  Satyayuga.

Continúa en la Parte 2: Lucha actual entre el bien el mal